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» » » Entramos en la última semana. Santo Domingo de la Calzada.


El "Gernika" al paso por Arizala.

A diferencia de lo que se suele hacer en una gran vuelta por etapas en el día de descanso, el extremo cansancio acumulado y pequeños problemas físicos de Guti en el gemelo izquierdo, propiciaban en este caso que se optara  por el descanso absoluto y es que, esta jornada estaba marcada y subrayada por Guti ya que la hacía coincidir en su propia casa de Navarra donde le esperaban su mujer y su hermana a las que hacía bastante tiempo ya que no veía.
Foto obligada cuando nos pararon al ver MMR.

Tras un día de descanso, merecido y requerido  después de unas jornadas bastante duras en general partíamos de Roncesvalles con destino a Santo Domingo de la Calzada. De nuevo, etapa larga, donde el alto de Etxauri era la principal dificultad de este día que nos llevaría a tierras riojanas, pero transcurrido casi en su totalidad por territorio navarro.
Vista desde la cima de Etxauri.

Uno de los mayores temores que teníamos en la salida de Roma era el ver como podría aguantar físicamente Guti la tercera semana de viaje, ya que en sus tiempos de corredor nunca llegó a hacer mas de 10-12 días seguidos de competición y aunque son niveles de exigencia distintos la estrategia a seguir podría decirse que es bastante similar. El día a día es muy importante y los pequeños detalles deben ser cuidados al máximo ya que las fuerzas que se ahorran cada día son de gran ayuda en días posteriores. Los últimos días antes de llegar a Roncesvalles se salían un poco del camino diseñado y por exigencias del guión tocaba acelerar de más en bastantes tramos, algo que puede pasar factura en esta última semana, sobre todo teniendo en cuenta que el entrenamiento previo de Guti no fue ni mucho menos, por motivos laborales, el que debiera haber llevado a cabo para afrontar con garantías una empresa como la que nos ocupa.
Paso por Erro.

Tras compartir desayuno con D.Juan Carlos, el padre que tan bién nos atendía en Roncesvalles, y demás compañeros que se encontraban a la mañana en la iglesia emprendíamos camino. Por suerte comprobábamos rapidamente que el descanso daba los resultados esperados y la mejora, tanto física como psicológica era evidente. Pasaba sin problemas el alto de Erro,801m, para bajar dirección Villaba, sobradamente conocida por todos como la casa de Miguel Indurain; la subida a Etxauri, 840m, daba buena cuenta de las fuerzas de Guti. Al paso por Arizala, encontrábamos una bonita reproducción del Guernika, bastante reciente, por cierto, y rapidamente nos dirigiamos hacia terreno riojano recordando antes batallas pasadas de nuestros años como corredores en lugares como Estella, Iratxe o Villamayor de Monjardín.
Tributo a Miguel Indurain en Villaba.

La llegada a Santo Domingo de la Calzada se producía sin mas sobresaltos y tras realizar la ofrenda al Santo, descansabamos en el albergue de la Cofradía del Santo, gracias a las gestiones de nuestro amigo Alberto quien junto con su familia nos ilustraba con interesantes historias calceatenses que compartiremos con vosotros en la próxima entrada.

Así nos despedimos hoy, ya con el Cántabrico en nuestros pensamientos pues mañana estaremos muy cerquita en el Santuario de La Bien Aparecida.

Hasta mañana!



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Peregrinación de Roma a Santiago en bicicleta de Agustín.
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